CRISIS TERMINAL DE LA ERA DEL PARIA EN EL PERÚ



El Perú se encuentra en estado terminal de descomposición y disolución, por todas las crisis y desórdenes que arrastra desde del fatídico 28 de julio de 1821, día en que se engendró esta republiqueta fallida de tiranuelos tras tiranuelos y de desgobiernos tras desgobiernos sin orden ni fin. Siendo este último 7 de diciembre, en que esta realidad llegó a su punto de no retorno irreversible de desgobierno, confusión, anarquía en un país sumamente caótico e ingobernable.

Aconteciendo, que en este último 7 de diciembre, el expresidente Pedro Castillo efectuó un intento de Golpe de Estado fallido para cerrar el Congreso y tomar así todas las instituciones públicas como el Poder Judicial y el Ministerio Publico; pero las Fuerzas Armadas en su conjunto y la Policía Nacional no lo respaldaron, y posteriormente en cuestión de horas terminó apresado por sus mismos guardias de seguridad que lo trasladaron a la Prefectura de Lima donde permaneció detenido, para luego ser trasladado a la Diroes, donde actualmente se encuentra preso el expresidente Alberto Fujimori. Y que ayer 15 de diciembre, el Poder Judicial le impuso 18 meses de prisión preventiva a Pedro Castillo por los delitos de conspiración y rebelión contra el “Estado de Derecho Constitucional”, que en consecuencia, va a estar preso hasta junio del año 2024.

Asimismo, en el trascurso de la caída de Castillo, su vicepresidenta Dina Boluarte asumió legalmente la presidencia como lo estipula la constitución política vigente; aunque el año pasado había manifestado públicamente, que si Castillo era destituido, ella iba a renunciar inmediatamente en apoyo a él, cuestión que no cumplió, viéndose así, claramente, la falta de principios y de palabra en la pseudopolítica democrática de nuestros tiempos. Y siendo notorio, que Dina Boluarte es la primera presidenta de la República del Perú, pero que en sus primeros días de su mandato ha dado muestras manifiestas de debilidad y desgobierno.

Tal es así que posteriormente en los días sucesivos, se suscitaron protestas, marchas, bloqueos de carreteras por parte de los manifestantes que no estban de acuerdo con que Castillo fuera destituido de la presidencia. Estos mismos manifestantes atacaron e incendiaron sedes del Poder Judicial y de la Fiscalía de la Nación en diferentes provincias del Perú, como también intentaron asaltar aeropuertos, llegando también a destruir instalaciones industriales de empresas alimentarias, como sucedió en el departamento de Arequipa. Asimismo, en Cuzco saquearon comercios turísticos en pleno centro de la ciudad. Es de acotar al respecto que estos eventos y acontecimientos, de la manera como se han dado, tanto espontanea como coordinadamente, resultan algo inédito que anteriormente no se había visto ni atestiguado en la historia republicana de este país.

Es de hacer notar también también que estos manifestantes se autoconvocaron espontáneamente aunque debe destacarse que fueron azuzados e incitados por dirigentes socialistas-comunistas como Vladimir Cerrón, Guido Bellido, Guillermo Bermejo miembros del partido político “Perú Libre”; ya que, por dicho partido político, Castillo llegó al poder ganando las elecciones electorales, siendo así, que por primera vez en la historia del Perú, un partido marxista-leninista llegaba al poder estatal.

También hay que constatar fundamentalmente, que una considerable parte mayoritaria de gentes, poblaciones, sectores y comunidades andinas: respaldan unilateralmente a Castillo a pesar de que éste tiene 51 carpetas fiscales por diversos delitos penales que ha cometido en el transcurso de su ejercicio presidencial, sustentándose estas imputaciones penales en las declaraciones de muchos testigos procesados que han manifestado con pruebas que Castillo recibió coimas cuantiosas por parte de empresarios (que son también testigos eficaces de la Fiscalía) para que sus empresas contraten y liciten (sin concurso ni evaluación previos) con el Estado para realizar obras públicas que nunca concluyeron; y así robar y saquear millones de soles al erario nacional público del Estado depredado por estos delincuentes empresarios capitalistas inescrupulosos. Siendo así, el mismo modus operandi de expresidentes peruanos desde Alejandro Toledo hasta Pedro Castillo, que se enriquecieron rápidamente estando en la función pública.

Asimismo es de destacar que Pedro Castillo, en menos de un año y medio de su desgobierno, no hizo prácticamente nada ni realizó ninguna obra pública ni inauguró ningún hospital ni carretera, siendo el presidelincuente más incapaz e inepto de la historia republicana de este país, y aún así hay masas que lo apoyan y lo respaldan obtusamente; porque llegó al poder con un discurso antisistema inédito que ningún anterior candidato presidencial había dado, un discurso anti-establishment como lo hizo Castillo. Pero que en la práctica nunca rompió con el sistema y en cambio hizo sus latrocinios y corrupciones sirviéndose de dicho sistema democrático neoliberal para sus propios intereses. Y que lastimosamente, esta gente se creyó dicho discurso demagógico populista de quinta, no entendiendo ni queriendo ver la realidad: de que Castillo desde el primer día que entró a Palacio de Gobierno (Desgobierno), entró solamente para robar y saquear al Estado, y así enriquecerse rápidamente en pocos meses de desgobierno.

Como consecuencia de todo esto a la fecha de hoy, dichas protestas y manifestaciones han dejado hasta el momento un saldo de 18 a 21 muertos entre los manifestantes, en tanto que dichos manifestantes por lo visto están dispuestos a pelear y a morir por Pedro Castillo Terrones que fue el peor presidente delincuente, coimero, corrupto, inepto y mitómano que en poco tiempo se arruinó así mismo y hundió más en la anarquía al Perú.

Finalmente es de recalcar que el Perú se encuentra metido de lleno en esta crisis terminal de la Era del Paria de los últimos tiempos y que el ciclo se va cerrando. Respecto de la misma acotemos que las soluciones democráticas no corrigen nada ni resuelven ninguna crisis política ni social ni económica, confirmando de pleno que estamos en tiempos extremos y exacerbados de la Edad de Hierro que revelaron los antiguos helenos o el Kali-Yuga de los antiguos indoarios o la Edad del Lobo que mencionaron los tradicionales nórdicos indoeuropeos. Ya que todo es casi anómalo y que esta anomalía patológica no sale de la nada, sino que es un proceso de años y de siglos como una enfermedad infecciosa que va incubando y que con el pasar del tiempo se va a manifestando y extremando. Y que en Occidente ya estamos a pleno es esta Crisis Terminal a todo nivel y desnivel.